sábado, 10 de octubre de 2009

The Gods Must Be Crazy. (I)

Hace muchos años vi una película, que a pesar de no tener una super producción me gustó tanto que aún hace unos meses la volví a ver y me reí tanto como la primer vez, "Los dioses deben estar locos".

En esta película había un personaje bosquimano llamado Xi, que vivía en una tribu que no conocía el mundo moderno de aquel entonces (1980) y creían (bueno yo creo lo mismo) que los dioses le proveían todo lo que necesitaban para vivir y pues su mundo era su aldea sus creencias, sus costumbres y sus dioses. Siendo esto así cuando Xi interactúo con el mundo moderno, se sentía como un extraño, creía que los dioses estaban "locos" porque no lograba entender que estaba pasando, que situaciones estaba viviendo, hoy yo me siento como Xi.

Basta con que no vea las noticias mundiales un día dos o tres, para sentirme como un extraño de una tribu en un mundo moderno que no entiende que es lo que pasa.

Esto lo digo porque ayer 09 de octubre me doy cuenta que la NASA estrella naves contra la Luna en busca de agua, en caso de encontrarla la idea es explotarla como se ha hecho con los recursos del Planeta Tierra, para utilizar la luna como base e ir a explotar, perdón, explorar el resto del universo, que loco suena no?

Sucedido eso me pregunté quien es el dueño de la Luna para que puedan hacer ese tipo de actividades, hace tiempo escuché que alguien había registrado la Luna a su nombre investigué y esto fue lo encontré: en el año 1953 un chileno llamado Jenaro Gajardo Vera ingresó a un sociedad llamada Sociedad Telescópica Interplanetaria quienes se iban a encargar de recibir los primeros extraterrestres que llegarían a la tierra. Perteneciendo a esta organización decidió registrar la Luna a su nombre.

Estos son datos de la escritura legal:

Como dato curioso el presidente de los Estados Unidos Richard Nixon en 1969 envió un comunicado a Jenaro Gajardo que decía así: "Solicito en nombre del pueblo de los Estados Unidos autorización para el descenso de los astronautas Aldrin, Collins y Armstrong en el satélite lunar que le pertenece".

A lo que el contestó: "En nombre de Jefferson, de Washington y del gran poeta Walt Whitman, autorizo el descenso de Aldrin, Collins y Armstrong en el satélite lunar que me pertenece, y lo que más me interesa no es sólo un feliz descenso de los astronautas, de esos valientes, sino también un feliz regreso a su patria. Gracias, señor Presidente".

Ya hace bastante que los locos andan sueltos, en fin las Naciones Unidas firmó un tratado que prohibe comprar o vender objetos fuera de la tierra, con lo que la Luna se quedaba sin dueño. A pesar de ello en 1980 un gringo llamado Dennis Hoppe, formaliza que compró la luna, actualmente se dedica a vender parcelas de nuestro, perdón, de su satélite natural de la tierra.

En verdad al igual que Xi cada vez me siento mas confundido, debe ser que soy muy limitado en mis pensamientos, pero volviendo a lo realizado por la NASA, quienes imagino deben estar autorizados por Gajardo, por Hoppe y obviamente por Dios, no los dioses locos, a experimentar con la Luna así como se hace con la Tierra, ya no veo tan mal la idea, de todas formas ya nos estamos acabando este planeta tenemos que ir buscado que otros lugares fuera de la tierra tenemos que ir a destruir... (será que eso piensan????)

De todas formas hace unos años, le regalé la Luna a mi esposa, así que el que quiera ir me pide permiso por favor.

Al igual que la película "Los dioses deben estar locos", tiene varias secuelas, espero seguir escribiendo algunas otras cosas que me hacen desubicarme del avance del mundo moderno.


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